La Cuaresma se inicia el Miércoles de Ceniza, finalizando con la celebración del Triduo Pascual, en plena Semana Santa. Está formada por seis domingos, siendo el sexto el Domingo de Ramos en la Pasión del Señor, en la que se hace la lectura de la Pasión en los templos. Este tiempo se caracteriza por la austeridad en las formas, primando en la vida de los fieles el ejercicio de la limosna, la oración y el ayuno. En las celebraciones litúrgicas se omite siempre el ALELUYA y los domingos el GLORIA. El color litúrgico que visten los sacerdotes es el morado, color penitencial por antonomasia, que también nos refiere a la espera de la Pascua y el cumplimiento de las promesas. En este tiempo se suele celebrar la solemnidad mariana de la Anunciación del Señor, que al caer en Semana Santa, este año se traslada al 8 de abril, primer lunes tras la semana de Pascua. También se celebra el 19 de marzo, la solemnidad de san José, esposo de la santísima virgen María.
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